Cacho Castaña: “Estuve una semana en coma mirando las manos de Dios”

El popular cantante Cacho Castaña habló con Primicias Ya de su regreso a los escenarios en octubre. Aclaró cómo se encuentra de salud y contó que dejó el cigarrillo: “Lo largué bien, no le tengo rencor", dijo.

¿Cómo te sentís Cacho?

Bien, estoy muy bien. Ahora estamos ensayando con los músicos para los shows en el Gran Rex. Estoy contento porque la verdad tenía muchas ganas de volver a cantar. Ya están confirmados los shows para el Rex y bueno, estamos con todas las pilas puestas.

Me imagino que estos meses lo viviste con mucha ansiedad ya que hace mucho que no se te ve en un escenario…

Y, lo viví mal porque estuve mal. Estuve en estado de coma una semana, después estuve treinta días más internado. Realmente no la pasé bien... Pero bueno, la vida sigue, no te podes quedar mirando para atrás ni mirando mucho para el futuro. Lo importante es que hoy es un día que no se vuelve a repetir.

¿Necesitabas parar un poco con tanto trabajo?

Sí, venía de un candombe bastante grande. Necesitaba parar pero no de esa forma, por supuesto. Hice una dieta que no se la recomiendo a nadie, bajé diez kilos pero la dieta es jodida.

¿Cómo está tu salud Cacho? ¿Te estás cuidando más?

Estoy bien. Estoy haciendo gimnasia día por medio, hago dieta. Estoy muy bien.

¿Seguís luchando contra el tabaquismo? ¿Pudiste dejar el cigarrillo?

Lo largué del todo. Cuando fuma alguien al lado mío no me molesta… Lo largué bien, no le tengo rencor. Es como mi separación, te separás pero no estás peleado.

¿Qué te dice la gente? ¿Te alientan para que dejes el cigarrillo?

Lo de la gente fue maravilloso. El público hizo cadenas de oraciones y no me canso de agradecerles todo lo que han estado conmigo y cómo me siguen a todos lados. Creo en los milagros pero la verdad creo que vi la luz amarilla no la blanca.

¿La última internación que tuviste fue la más complicada de todas?

Y sí porque estuve una semana en estado de coma. Estaba mirando las manos de Dios pero evidentemente tuve suerte y sucedió el milagro.



Diario Uno