Apertura de sesiones | Combustible: "Vamos a tomar las medidas para asegurar el abastecimiento"

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La presidenta Cristina Fernández de Kirchner advirtió que tomará “todas las medidas que sean necesarias para asegurar el abastecimiento de combustibles” en el mercado interno.

“Es una cuestión de defensa de la competencia, de defensa de la ley de abastecimiento. Es una defensa del interés de los argentinos y lo vamos a ejercitar con todas la armas que nos da la Constitución y la legislación vigente”, aseguró la Presidenta.

Al inaugurar el 130 período de sesiones ordinarias del Congreso nacional, Cristina destacó que “uno de los temas que deberá abordar el Poder Ejecutivo es lo que significa el incremento exponencial que tuvo la importación de combustible producto de la terrible caída de la producción en los últimos años”.

Remarcó que la caída en la producción del petróleo crudo “comenzó a partir de 1999 (primer año de la privatización a manos de Repsol) para descender el forma vertiginosa” hasta nuestros días.

“El año pasado tuvimos el mayor aumento de importaciones. Si no fuera por el aumento de importaciones de combustibles, la balanza superavitaria hubiera llegado a 15 mil millones de dólares", afirmó la Presidenta.

Precisó que Argentina pasó "de importar en 2010 aproximadamente 300 o 400 millones a más de 1.000 millones de dólares el año pasado", y añadió que "por un solo subrubro de combustibles, creció 179 por ciento la importación de todo el rubro”.

En consecuencia, aseguró que “como Poder Ejecutivo vamos a tomar todas las medidas que siempre hemos tomado para asegurar el abastecimiento de combustible a los argentinos”.

El discurso de Cristina se dio en medio de cortocircuitos que se desataron en los últimos meses entre el Gobierno y la española Repsol, propietaria de la mayoría accionaria de YPF, luego que el Poder Ejecutivo denunciara la falta de inversión de la empresa en exploración y producción, y la remesa de utilidades girada en los últimos años a la casa matriz.

En este marco, el representante del Estado en la empresa, Orlando Baratta, el secretario de Energía, Daniel Cameron, y el viceministro de Economía, Axel Kiciloff, fueron impedidos de ingresar a una reunión de directorio la semana pasada.

El Estado presentó una denuncia ante la Comisión Nacional de Valores (CNV), que dio por inválida la reunión de directorio por considerar violatorio el impedimento al acceso a los funcionarios.

Según la CNV, no existe ninguna cláusula en ningún convenio o estatuto societario que impida que los miembros del directorio concurran a las reuniones acompañados de asesores.

Por su parte, el titular de Repsol, Antonio Brufau, quien vino en varias oportunidades al país para seguir de cerca la situación, sostuvo en esa reunión de directorio que la empresa recibía presiones de parte del gobierno argentino.

Esto motivó la inmediata respuesta del Poder Ejecutivo, por parte del ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, quien le dijo a Brufau que “el Gobierno no amenaza", sino que "exige el cumplimiento de las leyes y defiende los intereses argentinos”.

A esto se sumó el pronunciamiento de las provincias petroleras, que salieron a exigir a las empresas operadoras -en especial a YPF- un sensible incremento en la producción en el plazo de dos años y advirtieron sobre la posibilidad de revertir concesiones en los yacimientos en los que no se cumplen los objetivos comprometidos.

A nivel bursátil, tras caer más de 22 por ciento la cotización de YPF en la Bolsa porteña, hoy los papeles de la petrolera mostraron una franca recuperación de casi 17 por ciento.

Cristina, ante la Asamblea Legislativa, remarcó que la garantía de abastecimiento de combustibles al mercado interno será “no solo a los que viajan en auto, tren, micro y colectivo, sino para sumarle competitividad a la economía argentina en cuanto a los costos de producción”.

“Porque se tienen que enterar de una vez por todas las grandes empresas que parte de sus utilidades se deben a los subsidios energéticos que reciben”, señaló la jefa de Estado.

Precisamente, les dijo a esas empresas que “sino, que vayan a preguntar el precio de la energía en los países colindantes”.

Así concluyó que a los subsidios “no los aprovechan simplemente los usuarios, sino también la competitividad de nuestra industria”.

La Presidenta subrayó que el aumento en las importaciones de combustible es un dato que “impacta, porque marca puntos de inflexión”.

Recordó que “el momento de mayor producción de YPF se vio en 1999, el año anterior a la desnacionalización”, y remarcó que a partir de ahí “fue cayendo totalmente su producción”.

Al respecto, puntualizó "hasta la desnacionalización, las provincias tuvimos participación. Santa cruz, que llegó a tener 4 por ciento; Neuquén, Mendoza, Chubut, Tierra del Fuego, Salta, Formosa, Río Negro y Jujuy”, precisó Cristina.

Precisamente esas provincias que fueron contenidas en la federalización de YPF, más San Juan, volvieron a impulsar con fuerza durante el último mes a la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (OFEPHI), y le exigieron a YPF que incremente su producción en las áreas donde la petrolera tiene concesión, bajo amenaza de revertir los contratos si no cumple con los objetivos de inversión y producción previstos.

Télam