En Animales Sueltos, Baby Etchecopar contó su terrible experiencia

Foto: Diario UNo |

Baby Etchecopar se brindó a un mano a mano imperdible con Alejandro Fantino, en el que el animador habló del infierno que vivió hace unos meses, en un terrible asalto.


Anoche, en Animales Sueltos, Baby Etchecopar arrancó hablando con Alejandro Fantino del cambio radical que dio su vida y su manera de pensar luego del incidente que casi le cuesta la vida a él y a su familia tras ser asaltado por delincuentes en su domicilio, meses atrás.

Fantino quiso saber si Etchecopar veía las cosas de otra manera luego de lo ocurrido y mencionó el dinero: “Hay otra valoración de la guita. Si Dios me permite quedarme donde estoy viviendo, yo no quiero más. La felicidad es otra cosa, los amigos…”, dijo Baby.

Al instante y, ya adentrándose en el infierno vivido, el animador relató un hecho que dejó pasmado al conductor de Animales Sueltos: “La vi a mi vieja cruzar en camisón en el tiroteo. A los dos días me di cuenta que estaba muerta. Y no fue una sombra, fue mi vieja en carne y hueso”, contó Baby.

“Es una película. No lo manejás en tiempo. Lo manejás en decir: “esto no me está pasado a mí””.

“Terminé en el piso sin la gamba. La tenía desprendida. No entendía nada. Me decía: “esto no pasó”.

“Pensé que esto había pasado. Esto lo viví en los 70. Después de todos estos años pasa lo mismo. No nos podemos seguir dando el gusto de ver muertos tapados… Que haya un idiota que no quiere trabajar y salga a la calle a matar gente no es culpa de los gobernantes. Tampoco estoy de acuerdo a que se los lleve a los presos a bailar y a tomar cerveza…”.

Luego, Baby relató los hechos tal y cual acontecieron el día en que él y su hijo casi pierden la vida: “Llegue a casa temprano porque fui al taller de un amigo. Llegué a casa y fui a la cocina. Vi una sombra y pensé que era alguien de mi familia. Aparece un tipo con una pistola GLOCK y me hace señas que me calle. Le dije que si era un robo que agarre el reloj, pero que no moleste a mi hija. Me dijo que a mi familia ya la tenían arriba y que a mi hija la iban a “violar”. Me pegó con la pistola en la cabeza. Yo no sabía que hacer y hacía chistes”.

“Cuando subo mi hija estaba llorando en la cama. Mi hijo gritaba que lo mataran a él, pero no a la madre. Me empezaron a gritar que querían plata. Me pegan en la garganta con la pistola y gatillan, pero la bala no sale. Tirá para atrás la corredera y me dice que me iba a matar”.

“Cuando me pega una trompada, hiperventilo y me siento a sentir desvanecido y me arrodillo en el piso tratando de gritar para que aflojen con los demás. Caigo y escucho un tiro. Le habían dado a mi hijo pero yo no sabía. En ese momento saqué la pistola y tiré para el lado del tipo. Los otros dos salen corriendo y tirando para todos lados. Cuando sale mi hijo lo fusilaron. Yo fui y lo saqué de la línea de tiro”.

“Chapoteábamos en sangre. Hay más sangre que en las películas. Los tipos no paraban de tirar”.

“Después que se llevan a mi hijo, un policía me hizo un torniquete que me salvó la vida”.

“El trabajo me ayudó a seguir adelante, aunque yo pude quedarme tirado en la cama”.

Además, Baby dijo que lamenta la muerte del chico que mató en defensa propia y que lo recordará para siempre. “Lo voy a llevar encima. Hubiera sido ideal que nosotros nos curemos y ellos estén presos.”, consideró.

Al explicar sobre la procedencia del arma que tenía bajo su poder, Etchecopar explicó: “El arma me la regaló Rodolfo Galimberti y estaba con las mismas balas de hace 14 años, cuando me la dio. Me dijo: “Guardala que un día te puede salvar la vida”. Esto te lo cuento por todas las cosas que se dijeron de mí”.

Sobre el presente, Baby dijo que no tenía miedo. “Me hubiera dado miedo si el país fuera un país tranquilo”.