Santa Rosa | El cacerolazo opositor al gobierno nacional se sintió en la capital pampeana
Unidos por el antikirchnerismo, dirigentes políticos, vecinos, estudiantes, productores agropecuarios, diputados, abogados y peronistas disidentes, hicieron sentir el cacerolazo opositor. (Foto: PlanB)
Reclamaron por la democracia, la defensa de la justicia y contra la corrupción. Una postal de una sociedad en defensa de una institucionalidad tradicional.
A las 20,00 en punto un importante número de vecinos ya se ubicó en el centro de la capital pampeana. Se unen a las marchas del 18 A en contra del gobierno nacional y en rechazo a la reforma judicial.
La manifestación fue variopinta y disímil, pero mayoritariamente fue capitalizada por la oposición de derecha o centro derecha al gobierno argentino.
Aunque hubo algunos militantes del PCR, las consignas distan mucho de reclamar una profundización de los cambios. Por el contrario, son una añoranza de la década del '90.
No es menos cierto tampoco, que muchas personas se suman a movilizaciones de este tipo también contra la oposición y que no se sienten representados por las fuerzas no K. En todo caso, este dato deja en evidencia la falta de una alternativa política al capitalismo y la imposibilidad de las fuerzas políticas del centro, centro izquierda, derecha y centro derecha de construir un discurso que despierte confianza y adhesión.
Reclamaron por la justicia, califican de "dictadura" al gobierno nacional y se mofaron del gobierno a partir de la denuncia periodística por lavado de dinero que involucraría a allegados a la familia Kirchner.
Pusieron sobre una balanza una bolsa con el signo $ y la letra K.
Entre el público se dejó ver el secretario General de ATE, Ricardo Araujo, el diputado provincial del FrePam, Carlos Bruno, el de Pueblo Nuevo, Darío Hernández, el dirigente de los jubilados, Nelson "Caito" Cafardo, el referente del MoFePa, Héctor Fazzini, el dirigente radical Hipólito "Poli" Bonaveri, el dirigente del PRO, Martín Ardohain, militantes del Partido Comunista Revolucionario, entre otros.
"Se siente, se siente, Cristina siempre miente", gritaba un grupo de jóvenes en la Plaza San Martín. La gran mayoría habló de institucionalidad, de justicia, democracia, pero también quedó evidenciado que el principal factor de unión es el rechazo al gobierno kirchnerista en su totalidad.
Los manifestantes hablaron de 2.000 personas. La mayoría de los medios contabilizaron cerca de un millar.
Fuente y Fotos Plan B









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