General Pico | Un apuñalado y un baleado

Un joven de 33 años fue baleado en el barrio Indios Ranqueles. Mientras que en el Rucci, otro joven fue atacado por al menos una persona que con un arma blanca le provocó un corte en el brazo. Ambos hechos se registraron en la madrugada de ayer

El año 2015 no fue recibido de la mejor manera por algunos ciudadanos de piquenses, que protagonizaron episodios violentos que terminaron con dos personas en la Guardia del hospital Centeno, uno con una herida de arma blanca y otro con dos impactos de bala. Por otro lado, y al igual que en Santa Rosa, hubo solo tres personas intoxicadas con alcohol y no se registraron lesionados por el uso de pirotecnia.

El personal del Servicio de Emergencias Médicas parecía tener un tranquilo comienzo de año hasta que cerca de las 4 horas la Policía requirió su presencia en varios puntos de la ciudad, donde debieron recoger a adolescentes y jóvenes con diferentes afecciones.

El primero de los casos tuvo lugar a las 4 horas en el barrio Indios Ranqueles, donde un muchacho de 33 años domiciliado en esa barriada fue sorprendido mientras caminaba por la calle por un tercero, que le disparó con un arma de fuego en varias oportunidades. Dos de las balas dieron el cuerpo de esta persona, que quedó tendida sobre una calle de tierra.

Vecinos llamaron al CECOM y notificaron de lo ocurrido, por lo que uniformados de la Comisaría Segunda se presentaron en calle 27 y 36, en donde encontraron a la víctima inconsciente, presuntamente debido al excesivo consumo de alcohol y estupefacientes.

Los agentes del orden convocaron a los profesionales del SEM, que minutos después llegaron, asistieron al damnificado, le aplicaron las primeras atenciones y lo trasladaron al hospital Gobernador Centeno, donde fue atendido en el Servicio de Guardia.

Los médicos del nosocomio local constataron que presentaba dos heridas de bala, con orificios de entrada y salida, una en el muslo izquierdo y otra en la pierna derecha. Tras realizarle las curaciones del caso lo dejaron en observación hasta horas del mediodía, cuando fue dado de alta y se marchó a su hogar, ya que las lesiones no revestían gravedad.

Dentro de la escasa información que brindó a las autoridades, el joven indicó que no ‘pudo observar a su agresor y que no pensaba radicar la correspondiente renuncia. Las fuentes consultadas informaron que esta persona cuenta con frondosos antecedentes por delitos varios, entre ellos el comercio de drogas, por lo que no descartan que el ataque haya sido motivado por algún problema surgido en esa actividad ilegal.

Apuñalado


Los trabajadores de Emergencias también debieron atender y recoger a otro joven en el barrio José Ignacio Rucci, más precisamente en calle 302 y 315, ya que fue atacado por al menos otra persona que, con un arma blanca, le provocó un corte en el antebrazo izquierdo. La presencia fue cerca de las 5 horas.

Nuevamente el personal de Guardia del centro de salud piquense atendió al herido, le aplicó las atenciones correspondientes y certificó que la herida era superficial, por lo que se la consideró “leve”. Después de las curaciones de rigor y algunos puntos de sutura, el lesionado se marchó por sus propios medios a su hogar.

Además, los empleados del SEM recogieron a dos menores alcoholizados cerca de las 4:50 horas, en calles 111 y 14, quienes habrían concurrido a una fiesta privada organizada en la zona. Los chicos, entre 15 y 17 años, fueron atendidos en el Servicio de Guardia del hospital Centeno, donde uno fue dado inmediatamente de alta, mientras que el otro, debido a su estado de intoxicación, quedó en observación algunas horas más.

En Santa Rosa también hubo tres personas que tuvieron que recibir atenciones médicas por exceso en el consumo del alcohol, pero al igual que los ebrios piquenses no sufrieron problemas serios.

Por otro lado, hubo otros incidentes con alcohólicos que causaron desmanes en la vía pública y que terminaron demorados. En total, el personal de la Seccional Primera demoró a tres mayores y tres menores de edad. Los primeros fueron trasladados a esa dependencia, mientras que los segundos fueron llevados a la Comisaria Cuarta del Menor, donde luego fueron entregados a sus tutores.

Por último, es para destacar que tanto en General Pico como en la capital pampeana no se registraron casos de lesionados por uso de pirotecnia, a diferencia de las fiestas navideñas, donde hubo varias personas heridas de gravedad.

El Diario LP

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