Región | Un bombero piquense recorrió más de 700 kilómetros en bicicleta

José Faundez pedaleó durante cinco días para unir la capital neuquina con su ciudad, en homenaje a cuatro de sus compañeros fallecidos. “Yo los apreciaba a los chicos, los conocí como cadetes, entonces queda el recuerdo”, dijo. (Foto: El Diario LP)

El bombero piquense José Faundez realizó una travesía en bicicleta desde la ciudad de Neuquén hasta General Pico, en honor a los voluntarios fallecidos Juan Rosas, Hugo Portugal, Manuel Olguín y Javier Pérez. Fueron más de 700 kilómetros los que recorrió junto a un amigo neuquino de toda la vida.

Faundez contó a El Diario que hace mucho tiempo pensaba en realizar este homenaje, pero la falta de apoyo pospuso el mismo hasta semanas atrás, cuando un amigo lo invitó a realizar un viaje en bicicleta en Neuquén. “Decidí yo por mí mismo hacer esto, en homenaje a los bomberos caídos”, señaló José.

Con 59 años y apenas un mes de preparación, el bombero de mayor trayectoria en General Pico viajó hacia la mencionada provincia, donde realizó dentro de la misma un viaje de 820 kilómetros. Una vez concluido el primer recorrido, y tras tres días de descanso, el voluntario decidió emprender el retorno a Pico por las rutas, acompañado por Pedro Rubilar, un amigo neuquino de 79 años, policía retirado, que conoció en 1977.

“Me siento muy contento porque a mi amigo se le cumplió el sueño de hacer esta travesía y me siento muy feliz en esta ciudad”, contó a este medio Pedro.

Secreto

El motivo del viaje se mantuvo en secreto para la familia de los homenajeados, quienes recién se enteraron al regreso de los protagonistas, cuando la novedad se difundió en las redes sociales. “Yo los apreciaba a los chicos, los conocí como cadetes, entonces queda el recuerdo”, comentó Faundez.

El bombero precisó que el primer viaje, de Neuquén capital al Copahue, recorrió junto a su amigo, entre ida y vuelta, 820 kilómetros. Tras un descanso de tres días, el miércoles 11 partieron desde la capital neuquina hacia General Pico. El viaje duró cinco días y en ese lapso, en diferentes etapas, transitaron 720 kilómetros más.

Durante el trayecto, fueron víctimas en varias oportunidades de las inclemencias del tiempo, tales como vientos fuertes en contra, lluvia intensa y caída de granizo de importante tamaño. De todas formas, la fuerza de voluntad nunca decayó, por lo que siguieron hasta cumplir el objetivo, parando ocasionalmente para armar campamento, comer y descansar.

Demostración

Ambos protagonistas de la historia destacaron que más allá del homenaje, el viaje les sirvió para demostrar a los demás y a sí mismos, que pese a su edad son capaces de realizar una travesía como ésta, con las exigencias físicas que presenta.

“No creía que iba a lograrlo, porque hay que estar arriba de la bicicleta tanto tiempo, más con la mochila como veníamos cargados nosotros”, admitió José Faundez, quien resaltó que “en la primera etapa para acá nos hicimos 170 kilómetros en un día” y que “en dos semanas hicimos 1.500 kilómetros”.

Lamentó el entrevistado que a su regreso solo dos exbomberos lo recibieran y no fuera la autobomba como en su momento le habían prometido. “Para algunas cosas hay compañerismo y para otras cosas no”, se quejó.

Fue la familia la que lo recibió junto a Pedro, a quien considera un integrante más. Dijo que ellos estaban “muy emocionados porque hacía rato que no me veían, y a él por su amigo- lo quieren como si fuera el tío”.

En el cierre de la entrevista, los dos amigos revelaron que planean realizar próximamente un viaje a San Juan, como agradecimiento a la Difunta Correa, ya que Rubilar tuvo un hijo enfermo que mejoró luego de ir al santuario.

EL Diario LP