Caso Baiotti | Weber fue acusado formalmente de intento de homicidio

Alejandro W. fue llevado hoy ante la Justicia. Su expareja Angelina Baiotti, sigue grave. La policía hizo un rastrillaje en busca del arma: aunque no la encontraron, el dermotest le dio "positivo".

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Angelina Baiotti, la mujer atacada a balazos por su expareja Alejandro W., no tenía botón antipánico. A pesar de que fue amenazada con un cuchillo el pasado 1º de mayo, solo estaba vigente una restricción de acercamiento. 

 

Este lunes, después de la hora 11, Alejandro W. fue formalizado en el Centro Judicial de esta ciudad donde quedó acusado de “intento de homicidio agravado" por el vínculo, alevosía y femicidio. Además, solicitó que se le dicte la prisión preventiva, hasta que finalice la investigación, por temor a fuga y entorpecimiento del proceso investigativo. El abogado defensor no se opuso a la prisión preventiva. Finalmente Ralli comunicó la acusación a Weber.

La policía dio a conocer extraoficialmente ayer que Alejandro W. había sido formalizado pasado el mediodía del domingo. Pero eso no ocurrió: en rigor, sólo declaró ante la fiscala del caso, Cecilia Martiní.

El defensor del acusado es José Mario Aguerrido. Martini está a cargo de la causa y ayer llegó a sus manos toda la documentación. Incluso ya tiene el análisis del dermotest a Alejandro W., que le dió "positivo" tal como confirmó después de la audiencia de hoy.

La fiscala lo acusó hoy de "tentativa de homicidio calificado agravado por el vínculo, alevosía y violencia de género". Además, al acusado le dictaron la prisión preventiva hasta que finalice el proceso.

Por el momento Alejandro W. sigue detenido en una celda de la Seccional Primera, aunque anoche se evaluaba su traslado. “Se presentó en la comisaría porque dijo que le habían avisado que su mujer tuvo un accidente”, narró una fuente policial el momento en que se entregó el acusado una hora después del hecho. Hoy, Martiní dijo que no fue tan así: ella considera que se presentó porque el trabajo policial de búsqueda (tanto el operativo cerrojo como contactar a sus allegados) no le dejó otra alternativa que presentarse en la comisaría, más allá de los argumentos que Alejandro W. allí esgrimió.

La funcionaria judicial hizo un raconto de cómo fueron los hechos, según los elementos que pudo recabar. Contó que a las 20:40, sobre el 240 de la calle Moreno entre Hilario Lagos e Irigoyen, Alejandro W. estacionó su Chevrolet Corsa, descendió y con una escopeta le disparó a su expareja por la espalda, quien iba caminando. Luego se subió al auto y huyó. "La policía estableció que se dirigió hacia la ruta 35 e intentó irse de la ciudad por la zona del Bajo Giuliani", señaló la fiscala.

Alejandro W. tampoco tenía autorización para portación ni para tenencia del arma, por lo cual también se incluyó ese delito en la acusación. En los distintos allanamientos, se le secuestraron cartuchos que coinciden con los que le disparó a Baiotti. Martiní consideró que se trata de "un hecho aberrante" y por eso pidió la preventiva hasta que termine el proceso por existir "peligro de fuga" y "en resguardo de la víctima, todo el círculo familiar, los testigos y demás que puedan aportar datos". También pidió la apertura del celular del acusado.

Además, quedó formalizada la primera denuncia que había hecho la víctima por amenazas, el 1º de mayo. Martiní consideró que son "hechos concurrentes". Aquel día, Alejandro W. amenazó a Baiotti con un cuchillo mientras le decía "si me dejás, te mato". Ese día se separaron. La acusación en este caso fue de "amenazas calificadas por el uso de arma blanca".

El defensor, José Mario Aguerrido, dijo que no estaba de acuerdo con la argumentación del "peligro de fuga" en el pedido de prisión preventiva pero no puso objeciones al resto de la formalización.

Alejandro W., ante la consulta del juez Ralli, no quiso declarar ni agregar nada más. Finalizada la audiencia, fue trasladado por la policía pero tuvo un mínimo "privilegio": a pedido de su defensor, no le colocaron las esposas en la sala y recién lo hicieron en el pasillo. ¿Para qué? Para que no salga esposado en las fotos.

El ataque que sufrió Baiotti fue con una escopeta, posiblemente calibre 16, un arma larga muy poderosa. El comisario Claudio Cano de la Unidad Funcional de Género, explicó que “por los testigos y la gravedad de las heridas el ataque fue con una escopeta”.

El arma no fue hallada: ayer por la tarde unos 20 policías divididos en dos grupos realizaron un rastrillaje a la vera de la Ruta Nacional 35, entre el Bajo Giuliani y la zona posterior a la loma que le sigue al barrio La Cuesta. Hoy hubo otro rastrillaje más, también con resultados negativos.

Cano confirmó que la denuncia por amenazas fue realizada el pasado 1º de mayo pasado. Alejandro W. permaneció detenido unas horas. En esa oportunidad las amenazas fueron realizadas con un arma blanca.

A pesar de estos hechos, no le adjudicaron un botón antipánico a la mujer. “El caso de las amenazas tuvo la intervención de la Justicia. Evaluamos que ni la Justicia ni la víctima consideraron necesario el botón antipánico. Pero ante un llamado de la víctima, la intervención es inmediata”, dijo Cano.

Grave estado

Angelina Baiotti, después del ataque, superó una intervención quirúrgica y sigue en estado “crítico”, según informó la oficina de Unidad Funcional de Género. Anoche no descartaban una nueva operación: tiene dañados el hígado, el intestino y la vejiga, además de un neumotórax.

Después, en la madrugada del domingo, la mujer fue trasladada al Sanatorio Santa Rosa donde permanece internada en la sala de terapia intensiva. “El estado es crítico”, insistió el comisario Cano.

Baiotti, que tenía dos hijas con Alejandro W., es empleada de la Subsecretaría de Industria del Ministerio de la Producción de la provincia. Alejandro W. trabaja en una concesionaria de autos. Según las personas que conocían a la pareja, tenía un historial de violencia contra la mujer.

El ataque se produjo la tarde-noche sábado, en pleno centro de Santa Rosa. La mujer bajó de un vehículo y se dirigía a la casa de su madre, cuando -según contó ella misma a la Policía- su expareja Alejandro W. (de la que se separó hace pocos meses) le disparó por la espalda. Baiotti quedó en grave estado, con un disparo en la espalda, con orificio de salida.

La escena del ataque fue cruenta. La mujer estaba en el piso, con una herida visible en el cuerpo. Al lado estaba tirado un caloventor que llevaba en sus manos al momento de la agresión.

Luego de que la mujer señalara a su expareja como el autor del disparo, la Policía lo buscó en distintos puntos de la ciudad. Alejandro W. apareció una hora después del hecho en la sede de la Seccional Primera con una excusa un tanto extraña. “Se presentó en la comisaría porque dijo que le habían avisado que su mujer tuvo un accidente”, contó un uniformado que pidió la reserva de su nombre.

Los investigadores también aseguran que ya cuentan con diferentes pruebas como para determinar que el muchacho fue el autor del disparo. Alejandro W. tenía una restricción de acercamiento a la casa donde vivía Baiotti, por una denuncia de amenazas que la mujer realizó el 1º de mayo pasado. A raíz de esas denuncias estuvo detenido por unas horas. Estaba con seguimiento de la Oficina de Asistencia a la Víctima. El vehículo de Alejandro W. está secuestrado en la Seccional Primera, a la espera del peritaje.

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