Santa Rosa | Este sábado, la audiencia pública por el megaproyecto inmobiliario del Club Belgrano

La audiencia pública para escuchar la opinión de los vecinos es en la sede del club, a las 17 horas.  (Foto Arch.: El DIario LP)

La audiencia pública programada por la Subsecretaría de Ecología para presentar el estudio de impacto ambiental del megaproyecto inmobiliario que el club Belgrano pretende llevar adelante se realizará finalmente este sábado 17 de octubre, a las 17 horas, en la sede de la entidad. La audiencia ya se suspendió dos veces. La primera, a pedido de los vecinos que cuestionaron que la convocatoria boicoteaba la participación. Y, la segunda, por un error de la dirigencia en los trámites formales de la convoctoria, la publicaron una semana antes en lugar de quince días.

Este sábado, finalmente, se realizará la audiencia sobre el polémico emprendimiento. Pueden participar vecinos y socios del club y es un paso previsto en la ley, pero la audiencia no es vinculante y solamene está previsto recoger la opinión de los vecinos. El club tendrá que hacer una asamblea de socios más adelante para aprobarlo finalmente. Además, se necesitaría que el Concejo Deliberante sancione una excepción al Código Urbanístico, ya que el proyecto no cumple con varias normativas de edificación vigentes.

“En la audiencia se presenta el proyecto, los vecinos hacen preguntas, manifiestan sus inquietudes y queda registrado en un acta, que se agrega al expediente y sirve como un elemento más de valoración para la comisión técnica, que es la que define si se aprueba o no y en qué condiciones”, explicó el subsecretario de Ecología, Darío Mariani.

Desde hace varias semanas, un grupo de socios y allegados al club recolecta firmas para manifestar su oposición al proyecto que tiene un sector de la dirigencia de la institución tricolor. Los impulsores insisten en que se trata de un “proyecto deportivo”, en tanto que los críticos -incluyendo a funcionarios del Gobierno Provincial- consideran que es más bien un “proyecto inmobiliario”.

Entre los principales referentes de quienes están juntando firmas para oponerse a la iniciativa se incluye el expresidente de la institución de Villa Alonso Martín Buss Jacob, quien señaló varios puntos de confrontación con la propuesta que tienen algunos dirigentes, entre ellos el presidente Horacio Rosales.

Rosales, en tanto, insiste en que la iniciativa apunta a mejorar la situación deportiva del club, que apenas si puede hacer frente a sus gastos del día a día pero no tiene cómo invertir en un mejoramiento de sus instalaciones, que a esta altura parece imprescindible.

El actual presidente indicó que “es un proyecto deportivo, no un proyecto comercial, con el que no tenemos nada que ver. Esto lo que busca es tener instalaciones nuevas. Insistió en que “para gerenciar un club se necesitan recursos para el día a día, para la luz, el gas, el teléfono, las cargas sociales, los impuestos... En eso estamos bien, pero hacen falta recursos para mejorar las instalaciones y es imposible, los costos son elevadísimos. Hacer los tapiales nuevos nos debe llevar dos millones de pesos”, ejemplificó. Y definió: “Es imposible generar ese dinero”.

La propuesta es instalar en el lugar una especie de shopping, aunque, en realidad, se trataría de un supermercado. Para poder llevar adelante el proyecto, que prevé la construcción de “un hotel, un shopping y salones comerciales” en el predio del club, se necesitan excepciones al Código Urbanístico. Eso debe ser aprobado por el Concejo.

La actual comisión directiva impulsa el rediseño y refuncionalización del predio de cuatro hectáreas ubicado en el corazón de Villa Alonso. A cambio de la construcción de un estadio (en ese mismo lugar) y otras instalaciones, una empresa obtendría una porción de ese terreno para la construcción de su emprendimiento.

En principio, la obra tiene resistencia de vecinos de Villa Alonso y de socios del club. La asamblea realizada en la entidad social no aprobó ceder el terreno. Pero, igualmente, la CD prosiguió con los trámites para presentar la integralidad del proyecto. Las gestiones se realizan a nivel de la aprobación del impacto ambiental y del Concejo Deliberante.

A finales de junio, se fijó la realización de una audiencia pública para analizar el impacto ambiental. En esa oportunidad, un grupo de vecinos expresó la inconveniencia de la realización de la audiencia ya que no se efectuó una convocatoria con suficiente anticipación ni difusión. Esa vez, ya se escucharon varias voces en contra del proyecto.

El presidente del club, Horacio Rosales, anunció que la audiencia convocada por la Secretaría de Ecología se realizaría el 1º de agosto. Pero esa audiencia no se concretó: el argumento fue que ese organismo provincial no publicó las convocatorias en el Boletín Oficial.

Después, el proyecto sufrió una patinada. La obra fue diseñada por los arquitectos María Gimena Binaghi y Oscar Fuentes. Pero también se mencionó, en la presentación de la obra, a la empresa de construcción CRIBA S.A. Y la propia firma se encargó de aclarar que no tenía vinculación alguna con la obra y que los arquitectos Binaghi y Fuentes ya no eran clientes de esa empresa. Ese incidente quedó aclarado: los arquitectos explicaron que fueron clientes de CRIBA y que, en esta etapa, la empresa no tenía nada que ver.

El grupo inversor estaría conformado por Fiduciaria Buenos Aires, según dijeron los arquitectos cuando presentaron la iniciativa en una asamblea del club, que es una empresa especialista en desarrollos inmobiliarios.

La obra abarcaría una superficie de 37.500 metros cuadrados. Es el área comprendida por las calles Belgrano, Paladino, Larrea y Tucumán, donde hoy están todas las instalaciones tricolores.

Los dirigentes de Belgrano ya presentaron en el Concejo Deliberante una nota el 8 de septiembre con los planos del megaemprendimento y solicitaron que se hagan excepciones a los límites que establece la ordenanza para poder concretar su construcción. Sin embargo, el Concejo todavía no tratará el tema porque primero debe cerrarse el expediente en la órbita del Ejecutivo, el área de Obras Particulares tiene que solicitar la excepción a los concejales. En los planos figura un edificio de departamentos de 14 pisos, un supermercado de 5.000 metros cuadrados y un shoping con 110 locales.

“Es difícil hacer una norma que se llame Club General Belgrano. Sería una excepción a todo lo dispuesto. No es que el edificio esté corrido sobre la ochava. Sería la norma Club Belgrano, básicamente. Es como hacer una ordenanza a medida”, advirtió el concejal del FrePam, Marcos Cuelle. “Hay una norma que prohíbe esa cantidad de pisos, hay otra que prohíbe la radicación de grandes superficies dentro de la Circunvalación, y hay otra que hay que dejar determinada cantidad de metros de pulmón de la manzana. Todo eso sería la excepción más grande que se ha dado en Santa Rosa. Una súper excepción”, insistió.