Provinciales | Darío Hernández quiere ponerle un freno a Farmacity

Foto: PlanB

El legislador del Frente Renovador presentó un proyecto de ley para que las sociedades anónimas no puedan ser habilitadas como farmacias, como sucede con Farmacity, cuya propiedad se vincula al vicejefe de gabinete del gobierno de Mauricio Macri, Mario Quintana.

Darío Hernández brindó precisiones sobre su la presentación de su proyecto de ley para impedir el ingreso de sociedad anónimas al mercado farmacéutico e intentar poner un freno a la instalación de Farmacity en La Pampa.


“Observamos que Farmacity apareció en Santa Rosa y General Pico, hay que saber que Quintana, el dueño, es uno de los ministros del gobierno nacional y la aparición de esas farmacias va en detrimento de las farmacias de los barrios y que esto implica una competencia desleal”, dijo en declaraciones radiales.

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Para Hernández, hay que ponerle un límite a la llegada de Farmacity. “Creo que uno tienen que legislar para que los recursos económicos queden en la provincia, para no castigar al pequeño y mediano empresario y defender los intereses de los pampeanos”, añadió al periodista de Radio Nacional, Daniel Lucchelli.

“Como quiero ser intendente de Santa Rosa, tengo que plantear la defensa de todos los sectores y no voy a ser un intendente que termine negociando con grandes empresas y por eso presento este proyecto de ley, para que las farmacias no estén en manos de sociedades anónimas, como Farmacity”, dijo.

“Hablé con autoridades delo colegio farmacéutico y hemos hecho un trabajo de ir farmacia por farmacia, para que los dueños sepan que al menos en La Pampa, alguien está planteando la defensa de los intereses de las pequeñas y medianas farmacias en La Pampa.

“El objetivo es ése, oponernos a que Farmacity como sociedad anónima, sea dueño de una farmacia. La farmacia es un bien social y que debe estar en manos de gente que dé la cara y no en manos de sociedades anónimas”, añadió.

—¿La idea es que no quede habilitada como farmacia Farmacity?

—El objetivo es que una sociedad anónima no pueda tener una farmacia, como es Farmacity. Lo que se plantea es quiénes deben ser los dueños de las farmacias y obvio no estamos hablando de sociedades anónimas, como Farmacity.

Creemos que las personas que van a buscar un medicamento tienen que contar con un farmacéutico, alguien que dé la cara y sea responsable y en las sociedades anónima no los hay.

—¿Qué opinan sus pares?

—No soy muy optimista. Mi trabajo es plantear estas cuestiones, luego si la mayoría automática del PJ no lo quiere tratar, no es un problema mío y sí de ellos.

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