Investigado por lavado | Espert pidió licencia hasta el final de su mandato

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Fue luego de ser imputado por presunto lavado de dinero. El cese de actividades, solicitado ante el presidente de la Cámara baja, Martín Menem, fue justificado por el legislador como "motivos particulares".

El diputado nacional por La Libertad Avanza (LLA), José Luis Espert, pidió licencia hasta el 8 de diciembre, en medio de una imputación por presunto lavado de dinero que lo vincula al empresario Federico "Fred" Machado, acusado de narcotráfico y reclamado por extradición por Estados Unidos.

El cese de actividades, solicitado ante el presidente de la Cámara baja, Martín Menem, fue justificado por el legislador como "por motivos particulares". 

Este movimiento se da poco después de que Espert renunciara a su candidatura en las próximas elecciones legislativas nacionales y a su cargo como titular de la Comisión de Presupuesto y Hacienda.

La investigación federal

La investigación contra el diputado fue iniciada por el fiscal federal de San Isidro, Fernando Domínguez, a raíz de un pago de 200.000 dólares que Espert recibió en 2020 de parte de Machado. 

La denuncia sostiene que el diputado recibió ese monto de una "banda criminal que formaba parte de estructuras mafiosas ligadas al narcotráfico" y que está siendo juzgada en el Distrito Judicial Este de Texas, Estados Unidos, por lavado de dinero, estafas y narcotráfico.

Machado se encuentra en el centro de un requerimiento de extradición por parte de Estados Unidos, que busca juzgarlo por estos graves cargos.

Descargos y futuro político

Pese a que Espert insiste en su inocencia y asegura ser víctima de una “operación política”, su horizonte inmediato se perfila en los tribunales. El desenlace de este expediente podría tener importantes derivaciones políticas, especialmente dentro de la coalición oficialista.

Mientras tanto, en el entorno del presidente Javier Milei la situación se observa con atención, esperando el fallo de la Corte Suprema que defina la situación del empresario. 

El caso no solo compromete la suerte de Espert y Machado, sino también la credibilidad del gobierno, que hizo de la transparencia y la ejemplaridad una de sus promesas centrales de gestión.

Cadena3